Aunque cojamos vacaciones, no debemos olvidarnos nunca de la higiene de nuestra dentadura y llevar nuestro cepillo de dientes allá a donde vayamos. Las salidas a comer fuera y los cambios de rutina pueden repercutir directamente sobre el estado de nuestros dientes.
Si quieres unas recomendaciones de última hora para tener más cuidado que nunca, ¡sigue leyendo!
Cuidados para tu boca
El cloro es el enemigo nº 1. Quizás desconozcamos este dato, pero si nos exponemos durante muchas horas al cloro de la piscina estaremos en peligro de desarrollar manchas en los dientes, sobre todo en los frontales. Y es que, el cloro contiene productos químicos que pueden atacar el esmalte y provocar el llamado ‘sarro del nadador’.
¿Haces más siestas? Pues debes recordar que debes lavarte los dientes antes de echarte a dar una cabezadita, exactamente igual que lo haces por las noches antes de irte a dormir. Cuando dormimos nuestra cantidad de saliva disminuye y las bacterias aprovechan para campar a sus anchas.
El picoteo y los refrescos. Cuando estamos en verano, tenemos una mayor tendencia a picar entre horas y también a beber bebidas azucaradas, hábitos que estropean nuestros dientes con mayor rapidez. Si a esto le sumas una relajación en nuestro hábitos higiénicos, al final acabarás teniendo que visitar al dentista en septiembre.
No pares de beber agua. Con las altas temperaturas, nuestro organismo pierde sales minerales y agua y esta falta de hidratación acaba traduciéndose en una sequedad bucal, lo que incrementa la densidad salivar y acaba provocando la pérdida de lubricación. Si practicas deporte, procura ingerir bebidas ricas en sodio.
Usa la pajita. Tomar bebidas muy frías, tales como granizados, será más fácil si lo haces con pajita, puesto que evitarás el roce con tu dentadura y por tanto, el dolor de tener unos dientes sensibles.
¿Te gusta bucear? Si tu respuesta es que sí, lo mejor que deberías hacer es consultarlo con dentista, pues la presión del agua cuando buceamos puede afectar a nuestras mandíbulas y piezas dentales. La presión de morder el tubo de oxígeno también puede afectarnos negativamente.
¿Cómo es tu higiene dental durante el verano?